sábado, 29 de diciembre de 2012

EMDR y el Procesamiento de la Información

Nuestro sistema neuronal registra las memorias y los aprendizajes como en una red de pescador.

En cada nudo estarían almacenados multitud de datos sobre las experiencias consideradas significativas por ese sistema de procesamiento. Esa información abarca toda la gama: emociones, pensamientos, sensaciones físicas, imágenes, creencias...

Al mismo tiempo, y siguiendo patrones muy particulares de cada persona, el sistema de procesamiento conecta esos nudos con otros, en una intrincada red de múltiples niveles no necesariamente "racionales". La "libre asociación" psicoanalítica, por ejemplo, nos permite aflorar esa red de conexiones.

Juguemos un poco: voy a escribir una palabra, si dejamos libre nuestra mente... ¿qué pensamientos / imágenes / sensaciones... brotan cuando leemos "gato"?.  Unas personas pensarán "felinos"; a otras les vendrá el nombre de su gato; o les vendrá la imagen de un gato paseando solemnemente; o unas ganas de rascarse el brazo... etc.

Cada cerebro, de forma muy particular, ha activado su propia red de conexiones a partir de la palabra "gato".

Mucha de esa información y de esa red no está en la superficie, en la consciencia, sino que pertenece al mundo de lo subconsciente. Puede quedar ahí depositada por muchas razones; una de ellas es que el material pueda ser perturbador, que nuestro sistema de procesamiento no lo haya podido digerir, y que por tanto lo haya "reprimido". Sin embargo, aunque no la "veamos", la información y la perturbación siguen ahí; podemos imaginar como fluyen a través de los hilos de la red alcanzando e influenciando otros nudos.


EMDR es un abordaje psicoterapéutico que se puede explicar con ese modelo del "Procesamiento Adaptativo de la Información": Nuestro cerebro nace como una "tabla rasa", con todo el hardware y el software operativo listos, eficientes... dispuestos a asimilar todas las experiencias, a aprender, a disfrutar, reir, llorar, enfadarse, amar, ... de forma ajustada y adaptativa. Pero finalmente nuestra mente almacenará todo lo que ocurra, ocurra como ocurra, incluyendo lo disfuncional... Serán estos datos que fluirán por nuestra red los que perturbarán nuestras vidas...

EMDR permite que nuestra red encuentre esos nudos; no solo eso, sino que facilita el desarrollo de nuestra natural capacidad de procesamiento, digiriendo esas perturbaciones y limpiando la red de perturbaciones. Es decir, encuentra los problemas, pero sobre todo ¡las soluciones!...


"Nada hay bajo el sol que no tenga solución"

lunes, 24 de diciembre de 2012

¿Los psicólogos se ponen tristes?

Pues sí, claro...  Somos seres de carne y hueso como los demás humanos...

Por ejemplo:

Cuando un paciente acaba su terapia y se va, empieza uno de los tantos duelos que vivimos en nuestra vida. Para el paciente... y para el profesional.

Recuerdo cuando era "profesor" de Cursos de Animación Sociocultural; a modo de disonancia les decía a los alumnos en la sesión inicial que habían escogido muy mal el trabajo pues estaban condenados al paro. Esto es, les quería transmitir que el Animador Sociocultural debe empeñar todo su esfuerzo en dinamizar una comunidad, y una vez conseguido,... debe retirarse, desaparecer, y dejar que ese grupo siga su propio camino...

Con nosotros, terapeutas, pasa lo mismo. Lo sabemos. Pero a veces hay pacientes que nos lo recuerdan de una forma especial.



Hace un tiempo "dí el alta" a una mujer excepcional, como tantas otras personas que he podido contemplar en mis consultas. Fue un trabajo duro, en el que hubo que reconectar, reprocesar, llorar... para llegar finalmente "al milagro de renacer a una nueva vida" en sus propias palabras.

Llegando ahí, a ese nuevo caminar, ... la despedida... Misión cumplida, misión imposible... Un abrazo. Un objeto transicional. Un adiós... Y llega la nueva paciente... se cierra la puerta.

Escribo ésto en honor a esa mujer, a todas las personas que pasan por nuestras manos, a mi y a todos los que las acompañamos por el camino, a nuestro trabajo.

sábado, 22 de diciembre de 2012

EMDR: ¡una verdadera máquina!

Muchas veces pienso en EMDR como si fuera una de esas "puertas traseras" que los informáticos ocultan en sus programas para poder acceder al núcleo del sistema, resetearlo o para facilitar funciones especiales...

Como terapeuta no paro de sorprenderme en cada sesión de la eficacia y la potencia del EMDR. Las personas que atiendo tampoco... y muchas notan semana a semana esos cambios. No se levantan ningún día "de color verde", totalmente transformadas, pero sí aprecian cambios que les hacen vivir y afrontar la vida de una forma nueva, diferente, más ajustada, satisfactoria, feliz...

Una constante que suelen comentar es como otras personas (amigos, familiares, ...) se dan cuenta de esos cambios, por ejemplo, haciendo afirmaciones acerca de su "nueva" asertividad, o su forma de disfrutar "por primera vez", ... o con preguntas del tipo "te noto diferente, ¿has ido a la peluquería?"... Así es...




A veces, no siempre, dos o tres sesiones pueden ser suficiente. No siempre. Eso depende de lo enredadas que estén las situaciones vividas por la persona, pero en cualquier caso EMDR hará su trabajo de "limpieza y reconstrucción".

¿Para qué sirve EMDR?. Pues para muchas situaciones: desde estados depresivos, ansiedades, fobias, duelos, estrés, acoso laboral, accidentes, violencia, pánico, etc, etc, etc. Originalmente EMDR fue aplicado para tratar el Estrés Postraumático en soldados norteamericanos que volvían de la guerra, pero luego se fue aplicando a otras situaciones no tan graves, más cotidianas... Y claro, si es capaz de disolver el trauma de guerra... pues más posibilidades tiene de aliviar el sufrimiento provocado por una ruptura de pareja, un mal rendimiento académico, un susto, un jefe malhumorado...


viernes, 21 de diciembre de 2012

EMDR: ciencia convertida en arte y en magia

¿Qué es EMDR?

Toda la potencia de nuestra mente a nuestro servicio.

En dos palabras...:


En Canarias contamos como primer Clínico y Consultor EMDR con José Ángel López

martes, 9 de octubre de 2012

el ojo de la cerradura

El "filtraje" o "visión de tunel" es otro de esos mecanismos irracionales de nuestra forma de pensar.

Ocurre cuando dejamos de ver el conjunto para concentrarnos como una lupa en alguno de los detalles, despreciando el resto de la información, como si miráramos el mundo a través del ojo de una cerradura, de una lupa o de un catalejo.

Juzgamos a un político por una palabra que dijo y obviamos los años de dedicación a la sociedad; nos torturamos durante días pensando en el mal gesto de aquella persona a la que atendimos y nos olvidamos de las decenas de personas que nos han sonreido; una mancha de café en un mantel nos hace detestar un restaurante de platos sabrosos, trato exquisito y decoración cuidada...

Estos mecanismos en sí mismos no son "malos" o "negativos", a fin de cuentas cumplen una función adaptativa, de mejorar el rendimiento práctico de nuestras capacidades cognitivas. Pero más de una vez nos pueden jugar malas pasadas.

 
En cualquier caso, nuestra mente tiene la potencia para pasar de un superzoom a un gran maxiangular a la hora de ver la realidad... ¡y la podemos usar!.

martes, 25 de septiembre de 2012

Personalización eres tú...



Lo que llamamos "personalización" es una simpática forma de procesar la información que tiene nuestro cerebro. Quedaría incluida dentro de lo que se llaman "pensamientos irracionales".

En la calle lo explicaríamos diciendo que los seres humanos tenemos la tendencia individual de considerarnos el centro del universo, y de mirarnos el ombligo más de lo preferible. Sí...

¿Un ejemplo?. Imaginemos que en el pasillo de nuestro edificio pasamos al lado de un vecino. Saludamos. El vecino no responde. ¿Qué solemos pensar?: que "YO no merezco ser tratado así, porque YO no le he hecho nada para tener que soportar ese desprecio".

En este ejemplo estamos pensando que la reacción del vecino (no saludar) se debe a algo que tiene que ver con NOSOTROS. Y el caso es que no tenemos ninguna PRUEBA de que sea así; es solo un pensamiento en nuestra cabeza, que al no sustentarse en ninguna evidencia racional pasa a ser eso que decíamos: un "pensamiento irracional". Mira por donde...

jueves, 5 de abril de 2012

La Semana Santa tiene una simbología, permite unas experiencias que puede darnos para escribir unas lineas desde la Psicología, independientemente de que se sea creyente o no.

Como psicólogo, como ser humano, a mi me parece "preciosa" toda la liturgia que empapa esta semana, donde se representa el drama y la tragedia de cada persona en su propia vida, y que no queda limitado a la simple rememoración de unos acontecimientos históricos.

- La culpa, ese sentimiento tan humano, tan contagioso, tan necesario por un lado como inútil y destructivo por otro. Necesitada de expresión, tras tomar conciencia de ella, desde la comprensión.
- La penitencia, en cuanto castigo, en cuanto reparación y superación. Camino de crecimiento y de aceptación de la culpa, pero centrándose en la capacidad de regeneración, de soldar la ruptura, en la búsqueda esperanzada de recuperar la paz y la auto-estima.
- El perdón, no solo externo, sino principalmente el auto-administrado. Esa conciencia de que merecemos ser queridos, principalmente por nosotros mismos. Fuerza transformadora que impulsa el cambio, a modo de renacimiento, de resurrección.
- El cambio, profundo, cuyo motor es el perdón, el compromiso con nuestro propia valía, con nuestra propia imagen, desde la experiencia del error, como motivo de crecimiento, no como anclaje al pasado.
- El tiempo, los ritmos... No se hace todo en un instante. Se necesita la maduración, y ese espacio peculiar, ese tiempo propio, para que cada emoción, cada experiencia tenga su desarrollo y reposo.
- El movimiento, que simbólicamente nos pone en marcha, en camino. No somos estáticos, somos seres cambiantes, nuestra psique tambien, una psique entroncada riquísimamente en un cuerpo que también está en constante cambio, crecimiento, desarrollo, muerte y nacimiento.
- El modelo, tan necesario en nuestra psicología del comportamiento, que permite la identificación y la proyección de todo lo nuestro, y la experiencia vicaria del éxito, no del éxito simple, sino del encarnado en el sufrimiento, en el mundo real.

La Semana Santa nos permite encontrarnos como seres humanos, al mismo tiempo que, quizás, como seres llamados a compartir la esencia de un dios (un dios de carne y hueso, con capacidad de ser torturado y crucificado, pero al mismo tiempo con capacidad de disfrutar del vino y de los amigos, y tambien, ¿por qué no?, de esa resurrección final... para volver de nuevo a comenzar).

jueves, 8 de marzo de 2012

¿Y a ti también te pasa?

Vengo colaborando desde hace muchos años con diferentes medios de comunicación.

Es frecuente que me hagan preguntas del tipo “pero, tú, los psicólogos, ¿también sufres estrés?”. Y siempre me resulta simpática la pregunta.

Es como pensar: “pero, ¿de qué planeta vienen los psicólogos?”. Yo se lo voy a decir: ¡del planeta Tierra!!!… :) sí…

Los psicólogos, como el resto de los mortales, padecemos estrés, a veces nos deprimimos, sentimos miedo, sufrimos, nos reímos, disfrutamos de la amistad y de la comida sabrosa...

A fin de cuentas los psicólogos no son más que unos profesionales que aplican unas técnicas contrastadas a otras personas, ni son místicos ni una raza de superman.

Con todo eso, sí es cierto que podríamos distinguir entre aquellos profesionales que simplemente aplican técnicas, y aquellos otros que además las viven, las integran en su propia vida. Y así podríamos diferenciar entre los “licenciados en psicología” y los “psicólogos”.

También es cierto que esa atribución de “poder divino” que el paciente haga sobre el profesional puede contribuir a la mejora. Pero ello no quiere decir ni que el psicólogo lo sea (un semidios) ni mucho menos que se lo crea él mismo. La confianza que el paciente pone en su profesional, la atribución de autoridad que le confiere, tendrá un papel efectivo en la mejora, sí.

miércoles, 29 de febrero de 2012

Curiosidades de nuestro cerebro y "su" forma de pensar

"Disonancia cognitiva".


(a) tendemos a buscar lo que confirma nuestra forma de pensar, y a rechazar lo que la contradice.

Y eso en contra lo que “creemos” sobre nosotros mismos: que somos extremadamente racionales.

Nos resulta muy difícil aceptar los grises, que otros piensen de forma distinta. Y eso porque nuestro cerebro es una máquina ahorradora a la que no le gustan los esfuerzos superfluos, que “prefiere” trabajar en blanco y negro, simplificando la realidad.

Corolarios:
-Los del barsa son cada vez más del barsa, y los del madrid del madrid...
Con las ideologías (y las religiones, por ejemplo) vendría a pasar algo parecido.
- Las “cámaras ocultas” explotan esta forma de procesar.

¿Qué tiene de positivo?. Aparte del efecto económico adaptativo, la disonancia cognitiva es usada, por ejemplo, por los buenos sistemas de enseñanza como una técnica motivacional.

lunes, 27 de febrero de 2012

Altas capacidades


1 ó 2 alumnos superdotados en cada una de nuestras aulas.

Eso es lo que deberíamos encontrar según los estudios.

Sin embargo, muchos profesores dirán que nunca han visto uno.

Entonces, ¿se equivocan esos datos?. Y si no, ¿dónde están esos niños y niñas con Altas Capacidades?.

Pues tristemente suelen engrosar las cifras de fracaso escolar. Sí. Triste y paradójico:
- A veces se les cataloga como "hiperactivos", porque son extremadamene curiosos, y exploradores, y líderes.
- Otras veces se "aburren", y abandonan todo interés por una enseñanza que nada les dice.
- Otras, por evitar ser catalogados como "raros" por su compañeros y evitar ser excluidos, se conforman con menos de lo que pueden.
- A veces, siguiendo el "mínimo esfuerzo", junto a no destacar y provocar las envidias de los demás, ajustan su rendimiento al 4'95... lo justito para aprobar.

¡Una pena!: ¡1 ó 2 por aula!
Y no solo esos niños y niñas pierden la oportunidad de desarrollar todos sus talentos, sino que la sociedad entera desperdicia esa segura inversión.